Receta navideña: Pastelitos de mandarina con aceite esencial de canela
Publicado: 21 diciembre, 2023 - Actualizado: 15 abril, 2024 | 3'
La canela (Cinnamomum cassia) es una especie arbórea aromática perteneciente a la familia de las Lauráceas. De la corteza de sus ramas jóvenes se obtiene la canela, muy utilizada en todo el mundo por su fragancia y sabor picante. Procede de Sri Lanka y fue parte importante del comercio medieval de especias y mucho antes en el imperio egipcio.
Dentro del arte culinario, la canela es una de las reinas de la cocina, especialmente en postres, panes, cafés, infusiones y batidos. Sin embargo, también adereza salsas para carnes y aves que le dan un toque aromático, con sabor a madera. La canela no solo ha inspirado a la cocina, sino a escritores, cineastas y compositores musicales, como por ejemplo La flor de la canela, el popular vals peruano compuesto por la cantautora Chabuca Granda.
¿Cómo se obtiene el aceite de canela?
La canela contiene, tanto en las hojas como en la corteza, moléculas aromáticas principalmente de tipo terpénico (cinámicos, α-terpineol, linalool, β-pinene, etc.). El aroma intenso de la canela procede principalmente de los terpenos cinámicos.
Para su correcta extracción y asegurar el quimiotipo del aceite esencial (identidad), se usa el método de destilación por arrastre de vapor de agua de las ramas y hojas.
Esta técnica es de las más utilizada porque asegura la integridad de las moléculas aromáticas de la planta, ya que utiliza vapor que atraviesa las hojas y ramas de la canela y extrae microgotas, que son destiladas y tamizadas posteriormente.
El aceite producido por este método tiene un color que va desde amarillo a marrón, con un sabor especiado, profundo y amaderado.
Consejos sobre el uso del aceite esencial
Los aceites esenciales se utilizan principalmente en la industria alimentaria, cosmética y en el bienestar por sus aromas.
Se pueden usar individualmente o mezclados entre sí, para crear combinaciones propias, existiendo así diferentes formas de disfrutar de sus beneficios: aderezando comidas, a través de un masaje, en el agua del baño, mediante vaporización o inhalación, para perfumar habitaciones, a través de compresas, etc.
Es importante resaltar que su uso generalmente se reduce a unas pocas gotas, siempre diluidas, y que debe respetarse la recomendación de empleo que se indica en el etiquetado del producto (algunos tienen calidad alimentaria y otra cosmética).
Lo que sí es clave es escoger aquellos aceites que especifiquen su quimiotipo, ya que esto representa la garantía de calidad y la identidad de la especie vegetal que se emplea para su extracción.
Receta navideña: Pastelitos de Mandarina
¿Quién le dice que NO a un postre durante la época festiva? ¡Pues casi nadie!
Los postres son la especialidad en la que más invertimos tiempo en las fiestas, especialmente porque ideamos diferentes formas de preparación, experimentamos con olores y sabores, texturas, en fin, que queremos deleitar al paladar, tanto el nuestro, como el de los comensales que se sienten a tu mesa.
Para ello, los aceites esenciales aportan ese toque de distinción e innovación al que aspiras para quedar como el mejor cocinero en estas fiestas.
Por esta razón queremos compartir esta deliciosa receta de pastelitos de mandarina para cuya elaboración emplearemos aceite esencial de canela. ¡Qué la disfrutes!
Ingredientes
Preparación1. Empezaremos nuestros pastelitos triturando 4 mandarinas que habremos pelado previamente. Deben quedar totalmente trituradas. 2. A continuación, mezclamos las mandarinas que hemos triturado anteriormente junto con 2 huevos, el edulcorante, el aceite de oliva, el aceite esencial de canela MARNYS y la ralladura de la mandarina. 3. En un bol tamizamos los ingredientes secos como la harina y los polvos de hornear. 4. Mezclamos los secos con los húmedos. 5. Engrasamos con un poco de aceite de oliva nuestro al molde apto para horno y vertemos la mezcla que hemos preparado. 6. Mientras se hace el bizcocho de nuestros pastelitos, procederemos a realizar la crema de mandarina. Para ello exprimimos las 4 mandarinas restantes y mezclamos el zumo con un poco de edulcorante MARNYS. 7. Mezclamos el zumo de la mandarina con un huevo y las dos cucharadas de maicena y ponemos la mezcla al baño maría. 8. No pares de remover hasta que la mezcla espese y se convierta en una crema que puedas meter en una manga pastelera. (El truquito es que si levantas la cuchara y la mezcla cae, aún hay que dejarlo 1 o 2 minutos más). 9. Pon la crema en una manga pastelera y decora tus pastelitos. 10. Yo decidí añadir a la decoración unas medallitas de chocolate, es opcional, pero el sabor del chocolate puro con mandarina queda genial. |