Ingredientes naturales que te ayudan a dormir
Publicado: 11 junio, 2024 | 5'
¿Duermes toda la noche, pero sientes que no has descansado? Según un estudio de la Sociedad Española de Neurología (SEN), más de 12 millones de españoles no descansan de forma adecuada y un 32% de la población española se despierta con la sensación de no haber tenido un sueño reparador, siendo esta situación más común entre adultos con trabajos de turnos de noche o rotativos.1
Dormir durante toda la noche no garantiza un sueño reparador, puesto que podemos no haber descansado correctamente por diversos motivos. Por eso, en ocasiones, aunque hayamos dormido 8 horas nos despertamos agotados y con sensación de no haber descansado lo suficiente.
Existen ingredientes de origen natural que se han utilizado tradicionalmente para el bienestar del descanso nocturno por sus efectos positivos en la conciliación del sueño y la relajación. Conoce la importancia del sueño en tu organismo y las acciones positivas que cumplen estos ingredientes como la melisa, la pasiflora o la valeriana al dormir.
Importancia del sueño en la salud y el bienestar
Un descanso adecuado es la base de nuestro organismo para el desarrollo correcto de muchas de nuestras funciones vitales y, por tanto, mantener nuestro bienestar. Según la National Sleep Foundation, se recomienda que los adultos duerman entre 7 y 9 horas al día.2
Si reducimos estas horas de sueño o bien no descansamos correctamente durante ellas, la secreción de melatonina (la hormona producida por nuestro cerebro que interviene en el ciclo natural del sueño) se ve alterada y se produce un desajuste en nuestro ciclo del sueño-vigilia que puede repercutir en nuestro día a día.
¿Qué ocurre si no duermo lo suficiente?
Las exigencias diarias generan estados de tensión en el organismo que a veces mencionamos como estar “estresados”. Entre las muchas actividades de nuestra rutina a las que puede afectar este estado, destacamos las horas de sueño. Una disminución del tiempo empleado en descansar puede generar a nivel cognitivo, falta de atención, así como menor rendimiento y productividad en nuestro día a día.
Si la falta de sueño se prolonga durante varios días o semanas, las funciones básicas del organismo pueden verse afectadas llegando a aparecer afecciones de mayor relevancia asociadas a la disminución de las horas de sueño necesarias.
Calidad del sueño, ¿dormir o descansar?
Además, de la cantidad de horas de sueño, su calidad también es un factor clave para el bienestar general, tanto físico como mental. Diferentes estudios relacionan unos adecuados patrones de sueño con un mejor funcionamiento del organismo y mayor esperanza de vida.
Cuando se habla de calidad de sueño, se tiene en cuenta tanto su duración, como la continuidad y la profundidad. Por tanto, engloba la capacidad de conciliar el sueño rápidamente y permanecer dormidos toda la noche. Cualquier desajuste en alguno de esos factores puede provocar que nos levantemos aún cansados y afectar, a largo plazo, al funcionamiento del organismo tanto a nivel físico como psicológico.
A la hora de lograr un sueño reparador, un día agitado o con mucha actividad puede llevar a una mayor dificultad para conciliar el sueño, pero también para mantenerlo durante la noche.
Ingredientes naturales que ayudan en la calidad del sueño
Existen extractos herbáceos y otros ingredientes que se utilizan desde la antigüedad por sus efectos positivos en el descanso nocturno y el estado de relajación, veamos algunos de ellos:
Melisa
Según la EFSA, la melisa contribuye a conseguir una relajación óptima, mantener un sueño saludable y conseguir un buen descanso. Además, la EMA también recoge su uso tradicional en este ámbito de relajación y facilitar el sueño.
Amapola de California
La amapola de California se ha utilizado tradicionalmente durante estados que generan efectos estresantes en el organismo y que dificultan el sueño, normalmente en combinación con otros ingredientes como la pasiflora y la valeriana para favorecer la conciliación del sueño y la relajación.
Valeriana
El uso de la valeriana se remonta a las culturas griega y romana, quienes la utilizaban en casos de excitabilidad. De su raíz se obtiene el extracto que se ha utilizado comúnmente por sus efectos positivos, al facilitar un estado de relajación que ayuda a la conciliación del sueño.
Pasiflora
Al igual que la valeriana y la amapola de California, la pasiflora también cuenta con una amplia trayectoria en el herbolario tradicional por su efecto positivo favoreciendo el descanso nocturno.
Melatonina
Como se ha mencionado antes, la melatonina es una hormona que produce nuestro cerebro y que interviene en el ciclo del sueño-vigilia y sus niveles controlan cuándo nos dormimos y el momento de despertarnos. Por eso, cualquier desajuste en sus niveles influye directamente en nuestro descanso. Según la EFSA, la melatonina contribuye a disminuir el tiempo necesario para conciliar el sueño y al alivio de la sensación subjetiva de desfase horario o jet lag.
Formas de consumir ingredientes naturales que ayudan a la calidad del sueño
En el caso de los extractos de plantas como la valeriana, la melisa, la pasiflora o la amapola de California, es muy común encontrarlos en forma de infusiones o bien en forma de complementos alimenticios.
Por otra parte, la melatonina se encuentra presente en alimentos como los lácteos, las nueces o los plátanos, pudiendo complementar la dieta con suplementos alimenticios que contengan este ingrediente.
Relahelp Dream
Relahelp Dream se trata de un complemento alimenticio que combina estos ingredientes que ayudan a la conciliación del sueño, así como a mantenerlo durante la noche. Es de utilidad en periodos de estrés laboral o a nivel personal para adultos que tienen dificultad para iniciar el sueño o también en aquellos que se despiertan y no pueden volver a dormir.
Consejos para mejorar la calidad del sueño
Además de vigilar nuestra alimentación y adoptar hábitos en nuestro día a día que favorezcan el descanso nocturno, crear una rutina antes de irnos a la cama también será de gran ayuda a la hora de poder descansar adecuadamente con pequeños gestos como:
- Evitar el uso de pantallas y la exposición a sonidos fuertes al menos una hora antes de acostarnos.
- Darnos una ducha caliente.
- Crear un ambiente propicio en la habitación: poca luz, aromaterapia relajante, temperatura adecuada…
- Practicar técnicas de meditación o relajación, e incluso yoga.
- Evitar realizar ejercicio físico intenso pocas horas antes de acostarnos.
Contenido revisado por los especialistas del área de Información Científica de MARNYS. Este artículo es informativo y no sustituye la consulta de un especialista.