Envejecimiento prematuro de la piel, cómo combatirlo
Publicado: 5 octubre, 2022 - Actualizado: 30 diciembre, 2022 | 5'
¿Qué es el envejecimiento prematuro?
Cuando se presentan cambios en la piel como la aparición de arrugas, líneas de expresión y manchas, que no corresponden a la edad biológica de la persona (frecuentemente llegados los 35 años), se denomina envejecimiento prematuro.
El proceso de envejecimiento de la piel ocurre a medida que incrementa nuestra edad biológica, y depende de la genética y de la raza (denominados factores internos).
Pero el aspecto y la salud de la piel no siempre está relacionado directamente con la edad de la persona, ya que puede verse alterado por factores externos, tales como una mala alimentación.
Causas del envejecimiento prematuro
Como decimos, en el proceso del envejecimiento de la piel influyen factores externos e internos y sus interacciones, así como la respuesta del cuerpo a estos factores.
Los factores externos o ambientales que afectan la apariencia y salud de la piel se pueden dividir en las siguientes categorías principales:
- Las radiaciones solares: radiación ultravioleta, luz visible y radiación infrarroja.
- La contaminación atmosférica.
- El humo del tabaco.
- La nutrición.
- El estilo de vida.
- La rutina de belleza.
Estos factores externos pueden ser causantes de la aparición de manchas, flacidez, arrugas o líneas de expresión a edades tempranas.
El exposoma y su efecto sobre la piel
El término exposoma describe la interacción de la piel con el medio ambiente y el posterior desarrollo de los signos de envejecimiento y de una piel poco saludable. Es decir, es el acumulo de las influencias ambientales (factores externos) y la respuesta asociada de la piel, incluyendo la exposición del medio ambiente, la dieta, el comportamiento y los factores internos.
El exposoma en el envejecimiento de la piel, está principalmente determinado por la radiación UV, la contaminación atmosférica, el humo del tabaco, la nutrición y los productos cosméticos.
La luz azul y su efecto sobre la piel
Hoy en día, además del impacto de todas las radiaciones solares y la contaminación atmosférica, nuestra piel está expuesta a la llamada luz azul.
Se ha demostrado que la luz azul genera especies reactivas de oxígeno (ROS) e induce daños oxidativos en la piel, de forma similar a la radiación UV. Sin embargo, a diferencia de ésta, la luz azul puede penetrar más profundamente en las capas de la piel, inducir una disfunción celular y dañar el ADN.
Por eso, la luz azul acelera el fotoenvejecimiento y afecta la integridad de la piel, disminuyendo la cantidad de carotenoides y elevando los precursores de la melanina, conduciendo a cambios en la pigmentación, como el oscurecimiento inmediato y persistente.
La luz azul también tiene un efecto negativo sobre el colágeno y la elastina, inhibiendo su formación y acelerando su degradación. Esto ocurre durante la exposición directa a la luz azul y a la radiación UV, o a través de los efectos posteriores, incluidos los ROS y los radicales libres que se generan.
¿Cómo prevenir el envejecimiento prematuro?
La integridad y la apariencia de la piel pueden ser mantenidas teniendo en cuenta cuatro aspectos básicos:
- Limpieza, que asegura la remoción de impurezas y la conservación del buen estado de los poros de la piel.
- Exfoliación, que rejuvenece la piel eliminando las capas externas del estrato córneo, minimizando las pequeñas arrugas.
- Protección solar, que es esencial para proteger del fotoenvejecimiento y mejorar la reparación natural.
- Cosméticos, que no sólo protegen del envejecimiento, sino que pueden aminorarlo si se aplican los productos y las cantidades correctas.
Consejos para prevenir el envejecimiento prematuro de la piel
Algunos factores que debes tener en cuenta para cuidar tu piel y prevenir los signos de envejecimiento prematuro son:
- Proteger tu piel del sol.
- Dieta equilibrada. Es recomendable el consumo de frutas y verduras que son alimentos ricos en antioxidantes.
- Evitar el consumo de alcohol y el tabaco, ya que afectan al envejecimiento de la piel.
- Ejercicio y estilo de vida activo.
- Cuidar las expresiones faciales y usar gafas de sol.
- Seguir unas rutinas de limpieza e hidratación adaptadas a tu tipo de piel.
- Cuidarnos del estrés y dedicar tiempo a nuestro bienestar.
- Vigilar la cantidad y calidad del sueño.
Cosmética antienvejecimiento, ¿qué es y qué ingredientes activos debo buscar?
La salud y la belleza de la piel se perciben como un indicador de bienestar general, lo que ha dado lugar a una creciente demanda de productos de cuidado de la piel cada vez más avanzados.
La cosmecéutica se refiere a los productos que aportan un beneficio fisiológico a la piel mediante productos químicos puros o ingredientes activos naturales. Se utilizan en el antienvejecimiento, la mejora de la función de barrera, los antiinflamatorios, la protección contra los rayos UV, la contaminación y la hidratación.
Los ingredientes naturales son los más recomendados y de tendencia actual. Estos ingredientes deben enfocarse en general en cuatro grandes áreas:
- Firmeza: reforzar las estructuras de sostén en la piel, ayudando a atenuar las arrugas y líneas de expresión. Ingredientes como el ácido hialurónico y algas como la pelvetia son buenos ejemplos de esta actividad.
- Pigmentación: mejorar la apariencia de la piel fotoenvejecida y pigmentada, y reducir la aparición de nuevas manchas. La morera blanca, la niacinamida y la vitamina C favorecen la unificación del tono de la piel.
- Reparación: energizar la piel del rostro proporcionando efecto anti-aging en piel fatigada y envejecida, reduciendo los signos de estrés y modulando el crecimiento celular. El hamamelis, los proteoglicanos y la trufa del norte son excelentes opciones para esta propiedad.
- Protección: proteger la piel del daño oxidativo y el fotoenvejecimiento producidos por la contaminación ambiental, luz azul o radiaciones emitidas por aparatos electrónicos. El marrubio blanco, el fitoplancton y el agua de aciano son antioxidantes naturales.